Con el avance de la tecnología, el reparto con drones se ha convertido en una posible tendencia futura. Este tipo de reparto puede aumentar la eficiencia, reducir costes, acortar los plazos de entrega y evitar la congestión vehicular y la contaminación ambiental. Sin embargo, también ha generado controversia, especialmente entre quienes trabajan en el sector de reparto: ¿perderán sus empleos debido a la aparición de los drones?

Según un estudio, los drones podrían desplazar 127 000 millones de dólares en mano de obra y servicios en múltiples industrias. Por ejemplo, gigantes tecnológicos como Amazon, Google y Apple podrían utilizar drones para realizar entregas en un futuro próximo, mientras que industrias como la aviación, la construcción y la agricultura también podrían utilizarlos para reemplazar a pilotos, obreros y agricultores. Muchos de los empleos en estas industrias requieren poca cualificación, están mal remunerados y son fácilmente reemplazados por la automatización.
Sin embargo, no todos los expertos creen que las entregas con drones provocarán desempleo masivo. Algunos argumentan que las entregas con drones son simplemente una innovación tecnológica que cambiará la naturaleza del trabajo en lugar de eliminarlo. Señalan que las entregas con drones no implican la eliminación total de la intervención humana, sino que requieren la colaboración humana. Por ejemplo, los drones seguirán necesitando operadores, personal de mantenimiento, supervisores, etc. Además, las entregas con drones también podrían generar nuevos empleos, como diseñadores de drones, analistas de datos, expertos en seguridad, etc.

Por lo tanto, el impacto de la entrega con drones en el empleo no es desigual. Tiene el potencial de amenazar algunos empleos tradicionales y crear otros nuevos. La clave reside en adaptarse a este cambio, mejorar las habilidades y la competitividad, y desarrollar políticas y regulaciones sensatas para proteger los derechos y la seguridad de los trabajadores.
Hora de publicación: 19 de octubre de 2023